Dejar de fumar y seguir sin hacerlo requiere determinación. Usted se tiene que sentir muy bien con usted mismo por lo lejos que ha llegado. Ahora que ha dejado de fumar, es momento de concentrarse en seguir sin hacerlo por un largo plazo.
Estas son 5 recomendaciones que le ayudarán a mantenerse sin fumar:
1. Tenga la guardia alta
Su cuerpo ha cambiado desde que empezó a fumar. Su cerebro ha aprendido a desear nicotina. Por eso, algunas personas, lugares, cosas y situaciones pueden desencadenar una fuerte necesidad de fumar, aunque hayan pasado años desde que dejó de fumar. Por eso nunca debe probarlo nuevamente, independientemente del tiempo que haya pasado desde que lo dejó.
Cuando haya dejado de fumar, la urgencia de fumar frecuentemente surge a la misma hora o en el mismo lugar. Muchas veces esto ocurre cuando hay otra persona que fuma cerca de usted. Identifique sus desencadenantes para que pueda estar preparado para resistir la tentación. Si siente un antojo, use las habilidades que ha aprendido.
2. Combata las ansias de fumar
Podría ser tentador darse por vencido y fumar cuando siente el antojo, pero cuanto más tiempo pase sin fumar, más desaparecerán estas ansias. Resista el deseo de fumar. Tener una o dos estrategias para lidiar con el antojo es útil (como salir a caminar o respirar profundamente). Recuerde que los antojos se desvanecerán en algunos minutos.
3. Manténgase animado
A medida que pasan los primeros días y semanas sin fumar, mantenga una actitud positiva. No se culpe ni se castigue si fuma un cigarrillo. No piense en dejar de fumar como algo que es “todo o nada”. Piense que es un día a la vez. Recuerde que dejar de fumar es un proceso de aprendizaje. Si tiene un desliz, vuélvase a comprometer inmediatamente con el plan de dejar de fumar. Piense en lo que desencadenó el deseo y piense cómo lidiará con eso si vuelve a aparecer.
4. Recompénsese por seguir sin fumar
Dejar de fumar es duro; seguir sin fumar es un logro importante. Asegúrese de premiarse. Ahora que no compra más cigarrillos, podría usar el dinero para comprarse algo que le guste. ¡Pero su recompensa no tiene que costar nada! Ahora que respira mejor, disfrute una buena caminata, o invite a un amigo a su casa a ver películas.
5. Apóyese en alguien
Aunque haya dejado de fumar hace un tiempo, todavía se le antojará fumar. Cuando eso ocurra, no tenga miedo de acudir a alguien que lo haya apoyado cuando dejó de fumar. Eso es totalmente normal y no significa que usted es débil. Muchas veces hablar sobre un antojo con otra persona pueden ayudarle a identificar lo que pasa mientras se le pasa el antojo.
Recuerde que dejar de fumar se logra un día a la vez. Celebre sus logros (grandes y pequeños); ¡usted se lo merece!