Los Ángeles. — El médico de Michael Jackson sabrá en las próximas horas cuál es el castigo que le corresponde por poner fin a la vida de uno de los mayores artistas de la historia del pop y dejar a sus tres hijos huérfanos de padre.
El doctor Conrad Murray recibirá su condena por homicidio involuntario luego de un juicio de seis semanas en el que se conoció la versión más detallada hasta el momento de las últimas horas de Jackson, pero dejó sin responder muchos interrogantes acerca del tratamiento con un poderoso anestésico para combatir el insomnio crónico.
La fiscalía pidió al juez Michael Pastor que condene a Murray al máximo de cuatro años de prisión, que probablemente sería reducido por lo menos a la mitad debido a la superpoblación carcelaria. La defensa ha pedido una sentencia en suspenso para el cardiólogo, ya que perderá su licencia para ejercer la medicina y probablemente sufrirá el ostracismo por el resto de su vida.
Los familiares de Jackson podrán hacer declaraciones antes de la sentencia, pero no estaba claro si alguno ejercería ese derecho.
La muerte de Jackson en junio de 2009 causó estupor en el mundo, lo mismo que la investigación que condujo a la formulación de cargos contra Murray en febrero de 2010.
Cortesia de la Prensa Asociada