Un tiroteo en la sede central de la Armada sembró este lunes el pánico en Washington a tan sólo cuatro kilómetros de la Casa Blanca y se cobró la vida de al menos 13 personas. Entre ellas el pistolero Aaron Alexis (34 años), abatido por la policía mientras disparaba sobre los empleados del complejo militar.
Las autoridades identificaron por sus huellas dactilares al autor de la masacre: un afroamericano con permiso de armas que había sido arrestado hace tres en la localidad texana de Fort Worth.
Según un portavoz de la Armada, Alexis sirvió en la Armada entre mayo de 2007 y enero de 2011. El pistolero sirvió como electricista de aviación en un escuadrón con base en la ciudad texana de Fort Worth y fue despedido por problemas de conducta después de sendas denuncias en Seattle y Texas. Desde hace unos meses ejercía como informático en una filial de Hewlett-Packard que trabajaba para la institución.
Los testigos escucharon los primeros tres disparos en torno a las 8.20 de la mañana en el edificio 197: uno de los tres recintos que albergan el departamento que se encarga del mantenimiento de los submarinos y de los buques de la Armada de EEUU. Quienes estaban presentes entonces en la cafetería describen a un pistolero negro y ataviado con prendas oscuras disparando desde la cuarta planta contra quienes se asomaban al vestíbulo central del edificio.