WASHINGTON (AP) — En busca de medidas que pongan fin a la violencia derivada de las armas de fuego, el vicepresidente Joe Biden analizaba ideas con la industria de los videojuegos, como parte de los esfuerzos de la Casa Blanca tendentes a reunir sugerencias en respuesta a la matanza ocurrida en diciembre en una escuela primaria de Connecticut.
Biden se entrevistaba el viernes con representantes de los videojuegos en momentos en que la Casa Blanca considera los factores culturales que tal vez contribuyen a la conducta violenta de las personas.
El vicepresidente, que encabeza una comisión especial que presentará el martes recomendaciones al presidente Barack Obama, se reunió el jueves con otros representantes de la industria del espectáculo y las diversiones, incluidos los de Comcast Corp. y la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos.
La reunión del viernes tendrá lugar un día después de que la Asociación Nacional de Portadores de Armas de fuego rechazó la propuesta del gobierno, de que se restrinja la venta de cargadores de gran capacidad, y se mantuvo inflexible en su oposición a que se prohíba la comercialización de armas de asalto, tal como Obama dijo que propondría al Congreso.
La asociación (NRA por sus siglas en inglés) fue el jueves una de las primeras organizaciones defensoras del derecho civil a poseer armas de fuego que se entrevistó con Biden.
El presidente de la NRA, David Keene, respondió que sí a la pregunta que se le planteó el viernes, de si la asociación tiene apoyo suficiente en el Congreso para repeler una legislación que prohíba las ventas de armas de asalto.
“No creo que el Congreso aprobará una prohibición a las llamadas armas de asalto”, dijo Keene al programa “Today” de la NBC.
En una exposición previa a su reunión con representantes de la industria de los videojuegos, Biden recordó que el fallecido senador Daniel Patrick Moynihan lamentó en la década de 1980, durante las negociaciones de una iniciativa anticrimen, que el país cayera en actitudes sumamente permisivas.
Se desconoce, en todo caso, si el gobierno está dispuesto a recomendar maneras para abordar la descripción de la violencia ante los medios de comunicación.
El secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo en diciembre que no todas las medidas necesitaban la intervención del gobierno.
En un comunicado, seis grupos de la industria del entretenimiento, incluida la Asociación Cinematográfica de Estados unidos, dijo que “confían en que haremos nuestra parte en busca de soluciones significativas”.