NUEVA YORK (AP) — Los fanáticos que quieran acudir al Super Bowl tendrán que pagar el doble por los mejores asientos.
La NFL dijo que las 9.000 entradas más caras costarán unos 2.600 dólares para el Super Bowl que se jugará el 2 de febrero en el estadio MetLife en East Rutherford, Nueva Jersey.
Los boletos similares para el Super Bowl de la temporada pasada en Nueva Orleáns costaron 1.250 dólares.
Brian McCarthy, vocero de la NFL, indicó que los precios todavía no son finales, pero señaló que la liga analiza formas de “cerrar la brecha entre el precio del boleto y su valor verdadero, como se refleja en el mercado de reventa”.
“La singularidad de un Super Bowl en Nueva York/Nueva Jersey también está generando una demanda y anticipación sin precedentes”, agregó.
El próximo nivel de asientos costará unos 1.500 dólares, comparado con 950 en Nueva Orleáns. McCarthy indicó que el 40% de los boletos de entrada general costará menos de 1.000 dólares.
El estadio MetLife tiene capacidad para 82.000 personas, pero se reducirá por unos 5.000 para darle cabida a la prensa, cámaras y seguridad. Los asientos más caros tendrán acceso a restaurantes bajo techo, donde los fanáticos podrán refugiarse del frío.
Los boletos más baratos bajaron de 650 a 500 dólares. Unos 30.000 fanáticos se inscribieron en una lotería que cerró en junio, y 1.000 ganadores, el doble del Super Bowl pasado, sabrán pronto si ganaron.
En un intento por asegurar que esos fanáticos no vendan los boletos, la NFL por primera vez exigirá que los dueños de los boletos acudan a un portón específico para recogerlos mientras entran al estadio. Luego no podrán salir al estacionamiento, dijo McCarthy.
El diario The Wall Street Journal fue el primero en reportar sobre el aumento en los precios.