WASHINGTON (AP) — “Celia & Johnny”, el clásico de la salsa de 1974 de Celia Cruz y Johnny Pacheco, será preservado por la biblioteca del Congreso estadounidense junto a trabajos de la cantante de ascendencia mexicana Linda Ronstadt, la banda de rock irlandesa U2 y el cantautor y guitarrista estadounidense Jeff Buckley.
Las obras que irán al registro nacional de grabaciones fueron anunciadas el miércoles e incluyen piezas seminales del siglo XX que fueron elegidas por su importancia cultural, histórica o estética.
La biblioteca destacó el álbum de la difunta guarachera de Cuba y el músico dominicano por la rumba “Quimbara”, que se convirtió en uno de los más grandes clásicos de Cruz y le mereció pronto el apodo de Reina de la Salsa.
La lista incluye los discos “Heart Like a Wheel” (1974) de Ronstadt y “The Joshua Tree” (1987) de U2, así como el sencillo “Hallelujah” (1994) de Buckley. También están “Fortunate Son” de Creedence Clearwater Revival y “Cathy’s Clown” de los Everly Brothers.
“Estas grabaciones representan una parte importante de la cultura y la historia estadounidense”, dijo el bibliotecario James Billington. “Mientras la tecnología cambia continuamente y los formatos se vuelven obsoletos, debemos asegurarnos de que el legado auditivo de nuestro país sea protegido”.
La biblioteca recibió numerosas sugerencias para incluir en el acervo el álbum de U2, que incluye éxitos como “Where the Streets Have no Name” y “With or Without You”. Su selección coincide con la del disco cristiano de Larry Norman “Only Visiting this Planet”.
Los encargados de la selección dijeron que el sonido de U2, aunque no es explícitamente religioso, ha tenido influencia y se le ha usado en algunas iglesias combinado con rock cristiano y citaron el ejemplo de la canción “I Still Haven’t Found What I’m Looking For”.
Una década antes fue Linda Ronstadt quien ayudó a definir una era musical interpretando canciones de otros autores, incursionando en distintos géneros y vendiendo millones de discos.
Por primera vez también se incluyeron extensas grabaciones de la Casa Blanca y se eligieron las de la época del presidente Lyndon Johnson.
Los materiales son incluidos en el programa de preservación de largo plazo del Registro Nacional de Grabaciones.