CIUDAD DEL VATICANO (AP) — El humo blanco coloreó la lluviosa noche romana y las campanas de la basílica de San Pedro repicaron con fuerza para anunciar al mundo que la Iglesia Católica tiene nuevo papa.
El número 266 de la historia.
En un rito que viene repitiéndose desde tiempos inmemoriales, la fumata blanca en la chimenea de la Capilla Sixtina anunció el miércoles que los cardenales eligieron por amplia mayoría al pontífice que guiará a los 1.200 millones de fieles que profesan la religión católica en unos tiempos especialmente difíciles.
El nombre del cardenal electo y el nombre que tome como papa no se conocerán hasta que se pronuncie el famoso “habemus papam” (tenemos papa) desde el balcón de la basílica de San Pedro dentro de aproximadamente 30 minutos.
Antes de su primer mensaje al mundo, el nuevo papa será conducido a la llamada sala de lágrimas de la Capilla Sixtina, donde le aguarda la clásica vestimenta papal en tres tallas diferentes.
La prensa italiana citaba entre los principales favoritos al brasileño Odilo Scherer y el italiano Angelo Scola. Pero también se mencionaban otros como el estadounidense Timothy Dolan.
El humo blanco emergió al lluvioso cielo de Roma en la tarde del segundo día de cónclave y tras sólo dos fumatas negras, como ya sucediera en el cónclave de 2005.
Miles de fieles congregados en la plaza de San Pedro celebraron con júbilo la fumata, mientras las campanas de la basílica empezaban a repicar para festejar la noticia, tal y como manda la tradición.
El nuevo pontífice enfrentará uno de los momentos más complicados para la Iglesia en toda su historia. Las finanzas de la Santa Sede, en particular de la banca vaticana, han quedado en entredicho por supuestas acusaciones de corrupción.
Este asunto, unido a escándalos de abusos sexuales y al famoso caso Vatileaks, el informe redactado por tres cardenales sobre la filtración de documentos confidenciales de Benedicto XVI, será una de las asignaturas pendientes para el nuevo papa.