NUEVA YORK (AP) — Dirk Nowitzki no tuvo muchos elogios para su importante disparo. “Es probablemente el enceste más feo que he hecho para ganar un partido”, dijo el alemán.
“Básicamente, golpeó el tablero, toda la superficie del aro, le pegó por ahí a Jerry West (el jugador cuya silueta forma parte del logotipo de la NBA, impreso en el tablero), y volvió a elevarse”, describió. “Definitivamente fue un disparo muy feo”.
Pero cuando el balón se deslizó por la red, justo en el momento en que se agotaba el tiempo, resultó que el tiro antiestético sirvió para que los Mavericks de Dallas superaran el lunes 110-108 a los Knicks de Nueva York.
Los Mavericks dejaron ir una ventaja de ocho puntos en los últimos 90 segundos, pero lograron hilar una tercera victoria cuando el disparo de Nowizki finalmente entró.
“Ni siquiera tenía ganas de celebrar algo tan feo”, dijo Nowitzki.
Pero sus compañeros y el dueño de los Mavs, Mark Cuban, no tuvieron reparo en desatar el festejo. Corrieron a la cancha, donde se mostraron jubilosos por un triunfo que colocó a Dallas en el séptimo lugar de la Conferencia del Oeste.
Carmelo Anthony sumó 44 puntos y nueve rebotes para los Knicks. Ejerció una marca férrea en la última jugada de los Mavericks, pero no pudo ocultar su incredulidad luego de ver cómo el tiro de Nowitzki rebotaba primero en el tablero y luego en el aro, para entonces elevarse y finalmente entrar.
“Era como una aguja rebotando encima de un globo”, dijo Anthony. “Y al final nos desinfló”.
Vince Carter anotó 23 puntos y Monta Ellis sumó 22 para Dallas, que ha ganado nuevo de 11 y se ubica con 12 partidos arriba de .500.
También el lunes, Stephen Curry anotó 19 puntos, repartió nueve asistencias y capturó ocho rebotes, y los Warriors de Golden State dominaron a los Pistons de Detroit en la segunda mitad para derrotarlos por 104-96.
Curry no estuvo tan afinado, al acertar seis de 15 disparos de campo y sólo tres de nueve triples. Pero Golden State obtuvo una victoria auspiciosa en el comienzo de una larga gira de seis visitas.
“No siempre vamos a brillar y a divertirnos”, comentó Jermaine O’Neal, de los Warriors. “Si buscamos una oportunidad de competir realmente por un título, éste es el tipo de partidos que hay que ganar en los playoffs”.
Klay Thompson aportó otras 19 unidades a la causa de Golden State, que hilvanó su cuarta victoria consecutiva. Los Pistons han perdido cinco de siete compromisos desde que despidieron al entrenador Maurice Cheeks, sustituido en forma interina por John Loyer.
Los Warriors carecieron de David Lee, aquejado por una infección estomacal. El australiano Andrew Bogut se repuso en cambio de un problema en el hombro izquierdo y jugó 29 minutos antes de ser expulsado por acumulación de faltas.
Gerg Monroe sumó 23 puntos por los Pistons, que anotaron sólo 13 en el último cuarto. Detroit estaba abajo apenas por 63-62 en el intermedio, pero perdió su productividad ofensiva en la segunda mitad.
En otros partidos, los Bucks de Milwaukee propinaron a los 76ers de Filadelfia su undécima derrota consecutiva, esta vez por 130-110, y los Clippers de Los Ángeles doblegaron 123-110 a los Pelicans de Nueva Orleáns, con 24 puntos de Jamal Crawford.