PANAMA (AP) — A las puertas de volver a cruzarse en la cancha, México y Estados Unidos buscarán antes reparar el mal estreno que tuvieron en el inicio del hexagonal final de la CONCACAF rumbo al Mundial de 2014.
Arrastrando un descontento total de su afición tras dejarse empatar en casa por Jamaica, México intentará corregir temprano su senda al visitar el viernes a Honduras, mientras que Estados Unidos, que viene de caer 2-1 precisamente en casa de los “catrachos”, recibe a Costa Rica, al ponerse en marcha la segunda fecha de la fase, que se completa con el choque Jamaica-Panamá en Kingston.
Cuatro días después de esa jornada, México recibe a Estados Unidos en el Estadio Azteca en un choque entre los gigantes y acérrimos rivales de la zona.
Los mexicanos, que se clasificaron al hexagonal con foja perfecta al hilvanar seis triunfos seguidos, no pudieron pasar del empate sin goles contra los jamaiquinos en el Azteca en la primera fecha del hexagonal, que otorga tres pasajes directos a Brasil. Los dirigidos por José Manuel De la Torre lucieron fuera de forma y sin brújula, cediendo sorpresivamente un punto a los caribeños.
“A nadie nos gustó (el empate), a nadie”, subrayó recientemente el “Chepo” De la Torre. “He platicado con mis jugadores y me deja tranquilo el saber que están conscientes. Tenemos otro partido para corregir”.
El viaje a San Pedro Sula, una ciudad calurosa del Caribe hondureño, no debe ser tomado a la ligera por los mexicanos y De la Torre lo sabe bien. Un recuerdo cercano, México fue vapuleado en la última visita que hizo a la selección centroamericana al caer 3-1 en partido por las pasadas eliminatorias al Mundial de Sudáfrica de 2010.
De todas formas, “a Honduras hay que ir a ganar, no diría que como sea, porque debemos planear bien el partido”, señaló el timonel mexicano.
Una señal de que México busca más alternativas en ataque fue el llamado para ambos partidos del delantero Omar Bravo, un veterano de 33 años que disputó el Mundial de Alemania del 2006 y que anda haciendo goles con su club Atlas de Guadalajara.
México espera más que nunca el aporte de sus delanteros después del fiasco ante Jamaica y en ello la mayor responsabilidad cae en la figura de Javier “Chicharito” Hernández, el atacante del Manchester United. Los mexicanos sufrieron la semana pasada la baja del delantero Oribe Peralta, quien se lesionó la rodilla derecha.
El gigante de la CONCACAF no irá probablemente a especular en San Pedro Sula, según los hondureños.
“México siempre juega agresivo y lo hace muy bien de visita”, advirtió el mediocampista ofensivo hondureño Roger Espinoza, del Wigan inglés.
El timonel de Honduras, el colombiano Luis Fernando Suárez, piensa de la misma manera. “Vamos a recibir a un México con la categoría de siempre… que te puede atacar y de buena manera porque tiene a buenos jugadores”.
Pero Suárez asegura “que tenemos las armas listas para responderle a México”.
Honduras, que acompañó a México y Estados Unidos al Mundial de Sudáfrica como los presentantes de la CONCACAF, lidera sólo la tabla con las tres unidades del triunfo sobre el equipo estadounidense, el 6 de febrero.
Estados Unidos se quedó con esa espina atravesada en la garganta después de dejarse remontar en el marcador a 11 minutos del final.
La escuadra estadounidense recibe a una Costa Rica que le sacó sobre la hora un punto a Panamá con su empate a domicilio 2-2, y en momentos en que atraviesa páramos ya que tiene a ocho jugadores lesionados; el capitán Carlos Bocanegra dado de baja al perder presencia en la selección y con el referente Landon Donovan aún fuera intentando recuperar forma después de tomarse un largo descanso.
Estados Unidos se verá obligado a improvisar en la defensa a consecuencia de las lesiones.
El partido se disputará en Denver, Colorado, con temperaturas bajas, algo que no parece preocupar a los costarricenses.
“Con frío o con calor tenemos que ir a ganar”, dijo el atacante Joel Campbell, del Betis español. “Si queremos ir al Mundial tenemos que jugar bien en todas las canchas”. En su visita a la calurosa Panamá el equipo tico se repuso a dos goles en contra y terminó empatando con un tanto de tijera de su figura Bryan Ruiz sobre la hora.
Estados Unidos no puede darse el lujo de ceder puntos en casa cuando tiene encima el duro viaje a México.
Panamá, que es el único de los seis equipos en el hexagonal que nunca se ha clasificado a una Copa del Mundo, aún se relame la herida del empate ante los ticos en su feudo. Los panameños admiten que el empate los obliga a sacar un buen resultado en Kingston el viernes y a buscar luego una victoria en casa contra Honduras el martes.
“No son seis puntos imposibles”, dijo el timonel de los panameños Julio Dely Valdés, quien recordó la victoria a domicilio de Panamá sobre Jamaica por 2-1 en las eliminatorias al Mundial del 2006. Dely jugó en ese partido.
El cuarto del hexagonal irá a un repechaje con el primero de Oceanía.
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